Función
Los animales con abazones las usan para transportar alimento hasta sus madrigueras. Para vaciar un abazón, usan las patas delanteras, comprimiendo desde atrás hacia delante, el contenido del saco. Es una porción de la boca en estos animales deprovista de glándulas, de modo que la digestión no es un proceso importante en su interior. Un hámster, por ejemplo, puede mantener sus abazones llenos de alimento por un día entero.
Patologías
Los abazones están expuestos a alimentos afilados y tropezones, lo cual puede causar infecciones o abscesos y, ocasionalmente, prolapso de la bolsa hacia el exterior. En estos casos, un curso de antibióticos, analgésicos y, con probable intervención quirúrgica, el animal se recupera con rapidez, en la mayoría de los casos, siendo capaces de comer después de la cirugía.2 Ocasionalmente, al llenar el abazón con demasiados alimentos secos, el contenido puede fermentarse en el interior al ser imposible para el animal vaciar la bolsa, causando obstrucción. El llenar el abazón con agua destilada tiende a solucionar el problema. En casos de anomalías de uno o ambos abazones, el animal se comporta nervioso, se rasca las mejillas y puede dejar de comer.
Se llama aguijón1 al órgano o parte del cuerpo afilado presente en varios animales que normalmente expulsa algún tipo de veneno (normalmente tras ser clavado en la piel de otro animal) o da una descarga eléctrica. Un aguijón venenoso difiere de otros órganos punzantes en que se clava por sí mismo, a diferencia de los dientes, que se clavan gracias a la fuerza de las mandíbulas o de las espinas, que se clavan por acción de la víctima.
El principal tipo de aguijón es un órgano afilado de ataque o defensa, especialmente cuando está conectado con una glándula de veneno y adaptado para infligir heridas pinchando, como por ejemplo el aguijón caudal de un escorpión. Entre los mamíferos, el único que posee un aguijón venenoso es el ornitorrinco macho.
El aguijón suele estar ubicado en la parte trasera del animal, cerca de la cola (si la tiene). Entre los animales con aguijón se cuentan abejas, avispas y escorpiones, si bien el de este último no es homólogo al de los otros, sino más bien un ejemplo de evolución convergente.
Entre las abejas melíferas (y sólo entre ellas) el aguijón,2 un ovipositor modificado como en otros himenópteros picadores o aculeados (Aculeata), tiene forma de anzuelo, alojándose en la carne de la víctima tras desprenderse del cuerpo de la abeja, lo que provoca la muerte de ésta en pocos minutos. El aguijón tiene su propio ganglio que le permite ahondar en la carne de la víctima y liberar veneno durante varios minutos. La cuestión de cómo tal rasgo ha podido evolucionar, cuando es una desventaja obvia para el individuo, queda resuelta cuando se advierte que los mamíferos predadores pueden destruir fácilmente una colonia completa si no se les repele. Si la colonia es destruida, las obreras, que son estériles, morirán sin descendencia, así que sólo mediante la defensa de la colonia puede lograr que sus genes se transmitan.
Las puntas de los aguijones aseguran que un ataque de una abeja melífera sólo es suicida si la víctima es un mamífero, pudiendo picar a otras abejas (en batalla intercoloniales) repetidamente. Así, bajo condiciones naturales, el carácter suicida del aguijón de la abeja melífera sólo entra en juego en caso de un atacante que amenace con destruir toda la colonia. El aguijón de todas las demás abejas y avispas no tiene esta punta, por lo que puede ser usado para picar a mamíferos repetidamente sin morir.
Para criaturas como las medusas, el aguijón puede aludir a los tentáculos que llevan los cnidocitos para capturar y paralizar a sus presas.
Por extensión, el término se aplica a veces al colmillo (un diente modificado) de las serpientes[cita requerida]. Una especie de serpiente extremadamente común en Sudáfrica, Psammophylax rhombeatus, incluso se conoce como skaapsteker o ‘aguijón de ovejas’.
No hay comentarios:
Publicar un comentario