miércoles, 26 de abril de 2017

Anatomía animal

anatomía de los artrópodos

El telson en una pieza o somita que se encuentra al final del abdomen de muchos artrópodos. No se considera un verdadero segmento porque no está presente en estado embrionario, y es homólogo al pigidio de los anélidos.
En arácnidos, y más concretamente en escorpiones, es la uña venenosa o aguijón con el que inyectan a sus víctimas; está detrás de los 6 segmentos que forman el postabdomen.
En crustáceos decápodos macruros, el telson es la pieza central de los urópodos, y es impar. Los urópodos son la parte final del cuerpo de los crustáceos; están a continuación del abdomen o pleon y normalmente son laminares o aplanados; el telson junto con los urópodos, presentan forma de abanico, por lo que se les denomina también abanico caudal; en ocasiones utilizan estos apéndices para ayudarse en sus desplazamientos (natación), ya que con un movimiento brusco del abdomen, del telson y de los urópodos consiguen propulsarse rápidamente hacia atrás.
Ventralmente, en la base del telson se encuentra el ano (final del tubo digestivo).







El tórax (del Griego "θώραξ" - thorax, "coraza")1 de los artrópodos es el tagma o región del cuerpo situado entre la cabeza y el abdomen. El término se aplica a crustáceos e insectos, a pesar de que no son tagmas homólogos. Con frecuencia, la cabeza y el tórax se fusionan parcial o totalmente para formar el cefalotórax, como pasa en muchos crustáceos y quelicerados; en éstos, el término apropiado para designarlo es prosoma. Los miriápodos poseen el cuerpo dividido en cabeza y tronco, de modo que no tienen tórax diferenciado.

Hexápodos

Tórax de mosca doméstica. 1, 2, 3: pro, meso y metanoto. 4, 5, 6: pro, meso y metapleura. 7, 8, 9: pro, meso y metaesternón.
El tórax de los insectos está integrado por tres metámeros o segmentos, denominados protórax (primer segmento), mesotórax (segundo segmento) y metatórax (tercer segmento); en él se insertan tres pares de patas (una en cada segmento) y dos pares de alas (mesotórax y metatórax).
Cada segmento está compuesto de cuatro grupos de placas llamadas escleritos, el dorsal se llama noto, el ventral es el esternón y los dos laterales son las pleuras.
En la pupa de algunos insectos, como los mosquitos la cabeza y el tórax están fusionados formando el céfalotorax.
En los himenópteros apócritos (abejasavispas y hormigas) el primer segmento del abdomen está fusionado con el tórax, que en este caso se llama propodeo.

Crustáceos

Esquema del cuerpo de un malacostráceo con todos los segmentos torácicos libres, de modo que el tórax y el pereion son equivalentes.
La mayoría de crustáceos tienen un tórax diferenciado, el cual está formado por un número variable de segmentos; dichos segmentos se denominan toracómeros y sus apéndices toracópodos. Con frecuencia, uno o varios segmentos del tórax se fusionan con la cabeza; el conjunto de segmentos torácicos libres, no fusionados a la cabeza recibe el nombre de pereion; dichos segmentos son los pereionitos o pereiómeros y sus apéndices respectivos se conocen con el nombre de pereiópodos. Sólo si todos los segmentos torácicos son libres, el tórax y el pereion son términos equivalentes.








tráqueas son los órganos respiratorios de los artrópodos terrestres y de los onicóforos. El conjunto de tráqueas forma el sistema traqueal que es una red de tubos vacíos, progresivamente de menor diámetro (de 0,8 mm a pocos micrómetros),1 que penetra en los tejidos y aporta oxígeno directamente a las células, sin necesidad de la intervención del aparato circulatorio. Las tráqueas son invaginaciones del tegumento y por tanto están recubiertas por cutícula que se reemplaza con la muda (ecdisis). En la respiración traqueal el transporte de gases respiratorios es totalmente independiente del aparato circulatorio por lo que, a diferencia de los vertebrados, el fluido circulatorio (hemolinfa) no guarda oxígeno, y se cree que este es uno de los factores que pueden limitar el tamaño máximo de los artrópodos terrestres. Poseen tráqueas los onicóforosarácnidosmiriápodos y los insectos.

Insectos

El sistema traqueal de los insectos consta de los siguientes elementos:
  • Estigmas o espiráculos. Las tráqueas conectan con el exterior a través de poros redondeados llamados estigmas o espiráculos que se abren al exterior directamente o poseen una cámara (atrio o cavidad subestigmética), sirven para respirar y comunicarse con los de su especie con estructuras como pelos o espinas que minimizan la pérdida de agua e impiden la entrada de polvo y parásitos; para tal fin, también tienen diferentes sistemas de cierre. La distribución de los espiráculos puede variar mucho entre los diferentes órdenes de insectos, pero en general cada segmento del cuerpo puede tener un par.2
  • Tráqueas. Son tubos vacíos por los que circulan los gases respiratorios; además de estar revestidas de cutícula presentan anillos en espiral (tenidios) que las refuerzan e impiden que se colapsen. Las tráqueas son permeables a los gases en todo su recorrido. En relación con las tráqueas pueden existir sacos aéreos que son cámaras muy dilatables que almacenan aire y facilitan el vuelo.
  • Traqueolas. Las tráqueas se ramifican y se hacen más estrechas para originar las traqueolas que transportan los gases metabólicos desde y hacia los tejidos. Las traqueolas, penetran en las células y actúan como puntos de intercambio de gases.
En algunos insectos acuáticos las tráqueas intercambian gases directamente a través del tegumento gracias a la existencia de estructuras branquiales recubiertas por cutícula muy fina, denominadas traqueobranquias.

Miriápodos

El sistema traqueal de los miriápodos es muy similar al de los insectos; a pesar de ello, hay pruebas de que evolucionaron independientemente.3 Las tráqueas son tubos vacíos por los que circulan los gases respiratorios; además de estar revestidas de cutícula presentan anillos en espiral (tenidios) que las refuerzan e impiden que se colapsen. Las tráqueas son permeables a los gases en todo su recorrido. En relación con las tráqueas pueden existir sacos aéreos que son cámaras muy dilatables que almacenan aire y facilitan el vuelo.

Arácnidos

Los arácnidos tienen dos estructuras respiratorias diferentes, los pulmones en libro y el sistema traqueal, que pueden presentarse juntas en el mismo animal. El sistema traqueal de los arácnidos tampoco es homólogo al de los insectos y miriápodos,3 por lo que en los artrópodos ha habido un notable fenómeno de convergencia evolutiva por lo que se refiere al desarrollo de un aparato respiratorio adecuado para la colonización del medio terrestre; el sistema traqueal apareció tres veces de manera independiente en tres grupos distintos de artrópodos.
Los araneidos más primitivos (Mesothelae) poseen dos pares de pulmones en libro y carecen de tráqueas; los araneomorfos, más evolucionados, poseen normalmente un par de pulmones y un sistema de tubos traqueales.
Los ricinúlidospseudoscorpionessolífugosopiliones y ácaros tienen también un sistema traqueal más o menos desarrollado, pero no así los escorpionesuropigiosamblipigios y esquizómidos, que respiran a través de pulmones en libro.

Onicóforos

Los onicóforos no son artrópodos, pero están estrechamente relacionados con ellos. Son animales terrestres que han desarrollado un sistema de tráqueas análogo a los anteriores. Las tráqueas se abren al exterior a través de pequeños poros (espiráculos) que no pueden regular su diámetro. La unidad traqueal es pequeña y abastece solo los tejidos más cercanos a su espiráculo. En este caso, también parece que las tráqueas de los onicóforos han evolucionado de manera independiente al los sistemas traqueales de los artrópodos.
Resultado de imagen de Tráquea (artrópodos)

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